Deborah Rodríguez canta Las 40

por GERARDO TAGLIAFERRO

Mientras la espero, sentado a la mesa del bar en la terminal Tres Cruces, me pregunto cuántos de los ojos que están a mi alrededor irán tras ella cuando trasponga esa puerta. Y me respondo que seguramente muchos. El interés que despertó esta participación uruguaya en los Juegos Olímpicos -de la mano del fútbol, claro- su meritoria actuación, su presencia en noticieros y programas de televisión, su imagen en carteles de la vía pública, todo eso pienso debe hacer que no pase desapercibida en ningún lado.

Error. Pronto me doy cuenta.

Allí viene, con un gorro con visera calzado hasta las orejas y enormes lentes negros que la transforman en una adolescente más, de tantas. Si la cruzara por la calle, jamás advertiría que ahí va Deborah Rodríguez, la mayor promesa del atletismo nacional. Y a los demás parece ocurrirles precisamente eso: contra lo que esperaba, nadie repara en su presencia. Sin embargo el gorro y los lentes no son su escondite, según cuenta; solo se trata de gustos de ocasión. Se quita los anteojos para las fotos, pero el gorro con visera permanece allí, dificultando las mejores tomas. También está presente el celular, protagonista involuntario de la charla: no menos de diez veces hay que hacer un paréntesis para permitir leer y responder mensajes de texto.

Tiene 19 años y acaba de superar en Londres su marca personal en 400 metros con vallas. Tan jovencita, es ya figura en el atletismo regional, con varios récords y medallas continentales y con paño para mejorar su performance en, al menos, un par de Juegos Olímpicos más. Se lo toma en serio. Muy chica se fue a vivir a Maldonado porque allí entrenaría mejor, y su día queda corto para hacer todo lo que intenta: además de entrenamiento de alta competencia, una carrera de escribana y un curso de inglés.

Hace unos días estuvo en un programa de televisión y fue pura sonrisa. Ésta de hoy, que después de mucho dudar pide un jugo de naranja y lo deja por la mitad, es mucho más seria. Apenas un par de veces mostrará los dientes, y en algún momento no ocultará algo que se podría definir como molestia.

No hay duda que se preocupa por su imagen, le interesa la opinión que de ella se formen los demás. Le comento que alguien me dijo que está muy "pillada" y antes de irse, con el grabador apagado, ofrecerá una charla con ese alguien que no tiene la menor idea de quién es. Para que la conozca y cambie su opinión. Después se calzará de nuevo los lentes y atravesará en sentido inverso el salón en el que ahora, luego de los flashes, ya algunos se codean y la señalan. Ella se pierde entre el gentío como si nada. Esto recién empieza.

1) ¿Qué es lo nuevo de esta notoriedad post juegos olímpicos?
Ha repercutido, las personas me reconocen. Mis padres siempre me enseñaron a mantener un perfil bajo y el tema de la publicidad, de las entrevistas, lo tomo como algo bueno a veces, y a veces no tanto. No estoy acostumbrada a estar tan ocupada, no me deja concentrarme al cien por ciento en el entrenamiento. Igualmente lo tomo de manera positiva porque mis padres me enseñaron que hay que vivir los momentos como si fueran los últimos. Y siempre tratando de disfrutar todo esto a mil.

2) Comenté a alguien que iba a entrevistarte y me dijo: "ah, está muy pillada".
(Me mira con cara de pocos amigos) La gente que no me conoce personalmente no me puede juzgar. Vos no me podés decir que soy pillada si nunca tuviste una conversación conmigo. Yo no juzgo a las personas si no las conozco. Esa persona tendría que tener una conversación conmigo a ver si cambia de opinión.

3) En Londres, después de competir, dijiste que le dedicabas tu actuación a la gente que te apoyó y también a la que quería que te fuera mal. ¿Había realmente gente que quería que te fuera mal?
Obviamente. Siempre surge la posibilidad, cuando sos famoso o reconocido, de que haya gente que no quiera que te vaya bien. En los Juegos Olímpicos los mensajes que recibí en un 98% eran de gente que me daba para adelante, gente que no conocía y me apoyaba, pero también surgió la posibilidad de que hubiera gente que me deseaba el mal o que me fuera mal. Gente que me decía que no soy nadie o que era un desastre todo lo que había hecho.

4) ¿Te duele eso?
No, lo tomo con humor, me resbala. Yo me apoyo en la gente que realmente me quiere y me desea el bien. Lo demás me resbala.

5) ¿Qué otra cosa hacés bien?
Creo que querer. A mi familia, a mis amigos. Creo que también estudiar.

6) ¿Tenés pareja?
No.

En la Villa Olímpica "nunca encontré una pareja tirada por ahí teniendo relaciones. Eso es mentira"

7) ¿Te vas a recibir de escribana?
Más que pensar en recibirme estoy pensando en no dejar de estudiar. Soy una persona que me aburro de las cosas fácilmente, hoy estoy estudiando escribanía y mañana me da la loca y me pongo a estudiar comunicación, y pasado otra cosa. Siempre pensando en poder recibirme algún día pero fundamentalmente en no dejar de estudiar y cumplir las metas que me planteo. En este país es muy complicado porque en el estudio no hay planes o proyectos que se adecuen a las necesidades del deportista. Igualmente estudio en una universidad, el Claeh, que me tiene entre algodones y me ayuda un montón. El Claeh me da un beca universitaria y la Alianza me da una para estudiar inglés, son cosas importantes y yo trato de hacer un esfuerzo para no defraudarlos y que la ayuda continúe.

8) El otro día, en un programa de televisión, hablaste del "odio" que se respira entre las competidoras antes de la largada. ¿Es tan así?
Mirá, en un deporte individual vos a tu rival no le vas a desear el bien, no la vas a querer, no la vas a mimar. No es que le desees el mal, pero estás odiándola, estás generando un odio... no un odio... estás buscando motivos en tu mente para querer ganarle. Un sentimiento que te genere furia, rabia, fuerza. No es que se genere un odio, pero sí un tipo de rabia por el cual le querés ganar.

9) Sin embargo tú no ibas a competir con otras sino contigo misma. Porque tu objetivo no era ganar una medalla sino superar tu marca. Sabías que no le ibas a ganar a otras competidoras.
Sí, obviamente que cuando estás en el puesto 43 en 43, ¿con quién va a ser tu competencia? Pero no porque otra esté en un nivel más alto que el mío yo voy a dejar de hacer mi carrera. Yo trato de hacer lo que he trabajado en los entrenamientos, intento repetir lo que he venido haciendo en todo este tiempo.

10) ¿Cómo es la Villa Olímpica? ¿Hay tanto descontrol como se dice?
No, no. Me parece que esos comentarios son como medio fuera de lugar... esperá, ¿de qué me hablas?

11) De que se dan muchos encuentros sexuales entre los atletas.
Bueno, eso me parece totalmente erróneo...

12) ¿No existe, no es así?
No es que no exista, existe sí. Hay más de 15 mil atletas, más los entrenadores, los dirigentes, obviamente es mentira que los 15 mil van a ser santos, tienen relaciones como cualquier persona normal. Pero no es una cosa, como se ha dicho, que ves gente tirada en el parque teniendo relaciones sexuales. Eso es mentira. En las tres semanas y media que estuve en Londres nunca encontré una pareja tirada por ahí teniendo relaciones. Sí existe la posibilidad... obviamente si se reparten 20 mil condones es por algo, pero si a vos te regalan cuatro o cinco los agarrás, pero no quiere decir que los vayas a utilizar. No quiere decir que se hayan utilizado los 20 mil preservativos. Eso es totalmente erróneo, somos deportistas, fuimos ahí con un objetivo. En general no vamos a los Juegos Olímpicos a conocer gente, a tener relaciones, no ves gente que antes de la competencia esté tomando o haciendo cosas que no debe.

13) ¿Y después?
Después tenés la posibilidad de salir, conocer gente, pero como algo normal no como algo extravagante. No encontrás a todo el mundo tirado en el parque.

"Doy gracias a Dios porque soy una chica afortunada, sé que mucha gente quisiera estar en mi lugar"

14) ¿Cómo era un día tuyo en la Villa?
Creo que no tenía vida. Entrenaba, comía, me acostaba a dormir una siesta, entrenaba, comía y me acostaba a dormir de nuevo. Todos los días eran iguales. Tampoco tuve la posibilidad de poder ver ninguna competencia antes de correr, estábamos totalmente encerrados en el apartamento. Después de competir sí, competí un domingo y el lunes salí a recorrer la ciudad. Salí un par de veces con los amigos que tengo alrededor del mundo, pude hacer compras. Pero antes no pudimos hacer absolutamente nada. Concentración total. Y todo el mundo estaba en la misma situación que nosotros, tenía a mis amigos y amigas de Brasil o de Norteamérica y todos estaban en la misma situación: descansábamos, comíamos y entrenábamos. O sea que fue bastante tranquilo todo.

15) ¿Tendrían que mejorar tus condiciones de entrenamiento para, por ejemplo, meterte en la final de tu especialidad en los Juegos de 2016?
Mis condiciones de entrenamiento vienen muy bien. Estamos haciendo un proceso con mi entrenador y con mi compañero Andrés (Silva) y los resultados se han notado. He mejorado casi un segundo por año. Se han dado las oportunidades de poder ir a entrenar al exterior, conseguimos un manager en Londres que me ayuda muchísimo en las competencias internacionales, podemos empezar a competir más seguido a nivel internacional.

16) El record mundial en tu especialidad está en 52 segundos. ¿A qué marca creés que podés llegar?
No sé. Yo creo que ningún humano conoce sus propios límites, no se puede decir: "hasta acá llegué y ya no puedo dar absolutamente más nada".

17) ¿Considerás que tenés el apoyo suficiente del Estado?
¿Es necesario hablar de eso? No quiero hacer ningún tipo de comentarios con respecto a eso porque se ha generado todo un conflicto y no me gustaría hablar.

18) ¿Te interesa la política?
(Se ríe) No soy muy fuerte en política, soy un desastre. ¡Como todavía no voté!

El consumo de sustancias "se ve en los físicos de las atletas, son hombres. Y eso no es por el gimnasio"

19) Sos cristiana. ¿Vas a la iglesia?
Sí, voy a la iglesia, pero tengo fe en Dios. Voy a la iglesia a conectarme con Dios y no con el cura. La fe en Dios es más importante.

20) ¿Rezás antes de las competencias?
Oro, sí.

21) ¿Por qué?
Porque me da seguridad, me da confianza, me da amor que es lo que necesito, yo me alimento de eso. Oro además porque mi abuelo murió hace dos años y creo que está en la gloria de Dios y siempre le oro a él. Y también doy gracias, uno tiene que ser siempre agradecido.

22) ¿Gracias por qué das?
Porque soy una chica afortunada, sé que mucha gente quisiera estar en mi lugar. Y yo hoy tengo la oportunidad de estar acá. Y doy gracias por todo lo que tengo, por tener salud que es lo más importante que uno tiene que tener. Doy gracias porque tengo una familia, porque no me falta comida, no me falta techo y por estar acompañada siempre que es lo que necesito para poder seguir adelante.

23) ¿Alguna vez te ofrecieron consumir algo para mejorar tu rendimiento?
Nunca. Y si me lo hubiesen ofrecido me hubiese negado, porque una persona tiene que ser honesta y estar limpia. Hoy tengo todo lo que tengo porque realmente corro limpia, no necesito tomar absolutamente nada para mejorar mi rendimiento.

24) En otras partes del mundo ¿los atletas toman algo para mejorar?
Toman.

25) Pero sustancias permitidas, se supone.
Y no permitidas también.

26) ¿Por qué no se detecta eso en los controles?
Porque la WADA (World Anti Doping Agency) está muy atrasada con el tema de las drogas que salen. Continuamente están saliendo drogas para mejorar el rendimiento, y cuando la WADA conoce una droga ya hay otras drogas nuevas.

27) ¿Eso puede haber pasado en los Juegos Olímpicos?
Puede.

"Gente de raza negra me preguntaba si yo era uruguaya y me decían: ‘¡Suárez! ¡Lo odiamos!' La gente no lo quería"

28) Por ejemplo, ¿vos competiste con chicas que quizás toman sustancias que no están todavía categorizadas como prohibidas?
Lo ves mismo en los físicos de las atletas, son hombres. Y eso no es por el gimnasio, si no yo estaría cuadrada (se ríe). El físico de ellas es muy diferente de lo que podría ser el cuerpo de una mujer si no tomara absolutamente nada.

29) ¿Eso es algo que se sabe y se tolera?
Se sabe y se tiene que tolerar.

30) ¿Por qué se tiene que tolerar?
Porque si vos no tenés ninguna prueba de que ese atleta está tomando algo, ¿qué podés decir? Uno lo sabe porque también es atleta y los entrenadores lo saben porque son entrenadores y hacen un análisis. Fijate que mi entrenador no solo me analiza a mí, sino que hace un análisis general del desarrollo de lo que son los tiempos y cómo van evolucionando las atletas y cómo van progresando. Si hay una progresión muy rápida de un año para el otro... algo tiene que haber.

31) ¿Vos no tomarías nada por cuidar tu salud o por qué?
Por una cuestión de ética. Si el día de mañana tomo algo no me lo perdonaría porque me cuestionaría a mí misma por mejorar mi rendimiento a través de una sustancia.

32) ¿En algún momento en tus 19 años de vida sentiste discriminación por el color de tu piel?
Sí. En el deporte no porque hoy en atletismo manda la raza negra, pero me ha pasado en Uruguay muchísimo. El tema de la discriminación es increíble. En Maldonado, donde vivo, es donde más se ve el tema de la discriminación porque no hay mucha cantidad de gente negra. En los cinco años que estoy no he visto una persona negra.

33) ¿En qué sentís concretamente esa discriminación?
Por ejemplo, en el verano en Punta del Este hay mucha gente de mucho dinero y es raro ver una negra. Me ha pasado de ir a la playa y que la gente me mirara de manera extraña.

34) Se piensan que sos brasilera seguramente.
Hasta el día de hoy me preguntan si soy brasilera. Pero a mí me resbala, me ha pasado de viajar a Europa y que ahí también surja la discriminación y el racismo. Pero si uno se siente orgulloso de lo que es y no le molesta lo que es, le da igual. Cuando era chica me pasaba en la escuela, pero ahí es más normal. Muchos niños no son conscientes de lo que dicen, a veces llegaba llorando a mi casa. La típica era "negra cachumbambé". Llegaba llorando y mis padres siempre me enseñaron que tenía que estar orgullosa de lo que soy.

35) ¿Crees que el racismo es un problema en Uruguay?
Sí, creo que es un problema y me gustaría hacer un proyecto de lucha contra el racismo. Y no solo contra el racismo, contra la discriminación en general, porque he visto discriminación de género, por gustos sexuales, por enfermedades. Me encantaría luchar contra eso porque es muy triste. Todas las personas en algún momento discriminamos a alguien.

36) Supongo que conociste a Luis Suárez ahora en Londres. ¿Qué sentiste el año pasado cuando tuvo el problema con el futbolista Evra y fue acusado de racista?
Mucha tristeza. En Londres lo abucheaban, le gritaban cosas. Es más, gente de raza negra me preguntaba si yo era uruguaya y me decían "¡Suárez! ¡Lo odiamos!" La gente no lo quería. Realmente, yo soy uruguaya, pero antes de ser uruguaya soy afrodescendiente y me siento igual de ofendida que todos los afrodescendientes y esa situación no me gustó. No me gustó la discriminación. Los negros somos como hermanos, como una familia.

37) ¿De qué lado te pusiste en la situación que protagonizó Suárez?
Yo estoy del lado del afrodescendiente. Soy uruguaya pero... si hubiese sido una vez (los supuestos insultos racistas) lo hubiese aceptado, porque en el deporte es común eso, pero fue más de una vez. Cuando el otro jugador le fue a dar la mano, Suárez se la sacó. ¿Por qué hace eso? Esas cosas no me gustan, si hoy se lo hacés a él mañana me lo hacés a mí.

En el incidente Suárez - Evra "yo estoy del lado del afrodescendiente"

38) ¿Se dio alguna charla sobre eso en la delegación uruguaya en Londres?
No.

39) Estás en una etapa en la que se acumulan los éxitos. Contame un fracaso.
No creo en el fracaso. Los malos momentos y las situaciones que no fueron buenas para uno son positivas, lo ayudan a crecer como atleta y como persona. No hay fracasos, todas son experiencias que ayudan a crecer.

40) ¿A qué le tenés miedo?
(Piensa) Tengo miedo... a que llegue la vejez y ponerme a pensar y arrepentirme de no haber hecho las cosas que realmente quería hacer. A eso le tengo miedo.

Montevideo Portal / Gerardo Tagliaferro
Fotos: Juan Manuel López