Este miércoles la Junta de Transparencia y Ética Pública publicó un informe en el que advierte sobre el "notorio incremento" en Uruguay de las contrataciones de familiares para ocupar cargos públicos, políticos o de confianza. Las recomendaciones también exhortan a los jerarcas a que "corrijan las situaciones irregulares", y que reduzcan las contrataciones directas.

El informe generó que varios intendentes departamentales, que han estado en la agenda pública por, justamente, la contratación de familiares o personas cercanas en cargos de confianza, se expresaran y tomaran medidas.

En ese sentido, el intendente de Artigas, Pablo Caram, sostuvo que en las administraciones tienen que haber "gente de confianza" y que por eso no removerá a sus funcionarios. Caram es acusado de contratar a varios familiares, como su pareja, sobrina y dos primos, en cargos de confianza.

"Se generó toda una mentira. Se hizo una onda expansiva y de concreto no hay nada. Fue totalmente mentirosa la acusación", dijo Caram, quien apuntó que su no incumplió ninguna norma. "No nos apartamos para nada del marco legal", dijo, en conferencia de prensa recogida por Subrayado.

El jerarca dijo que espera el llamado del Directorio del Partido Nacional para explicar su posición.

Enrique Antía, jefe comunal de Maldonado, también fue por la misma línea que Caram, y aseguró que "solo" contrató a su yerno para un cargo de confianza, y que no lo removerá.

"Trabajó mucho en policita y es un reconocido docente del departamento que se desempeña en Cultura. Asumo que un gobierno tiene que tener cargos de confianza, y yo no voy a tener enemigos en mis cargos. No nos podemos perder esa capacidad solo porque es un familiar", dijo en conferencia de prensa.

Por su parte, el intendente de Salto, el frenteamplista Andrés Lima, removerá a su pareja, quien ocupa el cargo de subdirectora de Gestión Humana para "cortar con lo sano", según informó El Observador