Contenido creado por Gerardo Carrasco
Salud

Tristes azares

Ludopatía: cuando el juego se convierte en algo serio

Se enmarca en las denominadas “adicciones sin sustancias”, y hay que prestar atención a las señales que la delatan.

06.06.2018 13:51

Lectura: 5'

2018-06-06T13:51:00-03:00
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Montevideo Portal

La adicción patológica a los juegos de azar, también llamada ludopatía, es el deseo irrefrenable de seguir apostando a pesar de los estragos que esto causa en tu vida. Apostar significa que estás dispuesto a arriesgar algo que valoras con la esperanza de recibir algo que tiene un valor aún mayor.

Las apuestas pueden estimular los sistemas cerebrales de recompensa al igual que las drogas o el alcohol, y causar adicción. Si tienes un problema de ludopatía, puedes hacer apuestas continuamente, ocultar tu comportamiento, consumir los ahorros, acumular deudas o, incluso, recurrir al robo o al fraude para sostener tu adicción.

La ludopatía es un trastorno grave que puede destruir vidas. Aunque el tratamiento de la ludopatía puede ser complejo, muchas personas que luchan contra este trastorno han encontrado ayuda a través del tratamiento profesional, según se lee en un artículo publicado por la prestigiosa Clínica Mayo (EEUU).


Síntomas

Los signos y síntomas de ludopatía incluyen los siguientes:

* Estar preocupado por las apuestas, por ejemplo, planificar continuamente cómo ganar más dinero con las apuestas.

* Sentir necesidad de apostar sumas de dinero cada vez más altas para lograr la misma emoción
Intentar controlar, reducir o detener las apuestas, sin éxito

* Sentirte inquieto o irritable al intentar reducir las apuestas.

* Apostar para escapar de los problemas o aliviar los sentimientos de desesperanza, culpa, ansiedad o depresión.

* Intentar recuperar el dinero perdido con más apuestas (recuperación de las pérdidas).

* Mentir a los miembros de la familia o a otras personas para ocultar la magnitud de las apuestas

* Poner en peligro o perder relaciones importantes, un trabajo u oportunidades académicas o laborales debido a las apuestas.

* Recurrir al robo o al fraude para recuperar el dinero de las apuestas.

* Pedir a otras personas que se hagan cargo de tus problemas económicos porque apostaste tu dinero.

A diferencia de la mayoría de los apostadores ocasionales que se detienen cuando pierden o que establecen un límite para perder, las personas con ludopatía no pueden evitar seguir jugando para recuperar su dinero, un patrón que se vuelve cada vez más destructivo con el tiempo.

Algunas personas con ludopatía pueden tener períodos de remisión en los que no apuestan o apuestan menos durante un tiempo. Sin embargo, sin tratamiento, la remisión generalmente no es permanente.

Cuándo consultar con un médico o un profesional de salud mental

¿Tus familiares, amigos o compañeros de trabajo expresaron su preocupación por tus apuestas? Si es así, escucha sus preocupaciones. Dado que la negación casi siempre es una característica de las conductas compulsivas o adictivas, tal vez te resulte difícil darte cuenta de que tienes un problema.

Si reconoces tus propias conductas de la lista de signos y síntomas de ludopatía, busca ayuda profesional.

Causas

No se comprende bien qué lleva a una persona a apostar de manera compulsiva. Al igual que muchos problemas, el origen de la ludopatía puede ser una combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales.

Factores de riesgo

Si bien la mayoría de las personas que juegan a las cartas o que apuestan nunca llegan a tener un problema con el juego y las apuestas, ciertos factores están más asociados a la ludopatía:

Trastornos de salud mental. Las personas que juegan y apuestan de manera compulsiva a menudo tienen problemas de abuso de sustancias, trastornos de personalidad, depresión o ansiedad. La ludopatía también puede estar asociada al trastorno bipolar, al trastorno obsesivo compulsivo o al trastorno por déficit de atención con hiperactividad.

Edad. La ludopatía es más frecuente en personas jóvenes y de mediana edad. El juego y las apuestas durante la infancia o los años de la adolescencia aumentan el riesgo de sufrir ludopatía más adelante. Sin embargo, la ludopatía en la población de adultos mayores también puede ser un problema.

Sexo. La ludopatía es más frecuente en hombres que en mujeres. Las mujeres que juegan por lo general empiezan más tarde en la vida y pueden volverse adictas con mayor rapidez. Sin embargo, los patrones de juego entre hombres y mujeres son cada vez más similares.

Influencia de familiares o amigos. Si tienes familiares o amigos con problemas de juego, las probabilidades de que tú también los tengas son mayores.

Medicamentos para tratar la enfermedad de Parkinson y el síndrome de las piernas inquietas. Ciertos medicamentos llamados agonistas dopaminérgicos pueden tener un efecto secundario raro que produce conductas compulsivas, como la ludopatía, en algunas personas.

Ciertas características de la personalidad. Ser una persona muy competitiva, adicta al trabajo, impulsiva, inquieta o que se aburre fácilmente puede aumentar el riesgo de padecer ludopatía.

Complicaciones

La ludopatía (adicción al juego) puede tener consecuencias profundas y duraderas en tu vida, por ejemplo:

* Problemas en las relaciones
* Problemas económicos, como la bancarrota
* Problemas legales o encarcelamiento
* Mal desempeño laboral o pérdida del empleo
* Mal estado de salud general
* Suicidio, intentos de suicidio o pensamientos suicidas

Prevención

Aunque no se ha demostrado que exista una forma de prevenir la ludopatía, los programas educativos dirigidos a las personas y los grupos con mayor riesgo pueden resultar de utilidad.

Si tienes factores de riesgo de sufrir ludopatía, considera la posibilidad de evitar las apuestas de todo tipo, las personas que apuestan y los lugares donde estas se realizan. Busca tratamiento ante el primer signo de un problema para ayudar a evitar que la ludopatía empeore.

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