Contenido creado por Gerardo Carrasco
Medioambiente

Una especie de salto

Investigan el misterio de la recuperación de población de ranas en Australia

Estos animales fueron diezmados décadas atrás por un agresivo hongo. Sin embargo, su población ha vuelto a florecer.

16.11.2017 09:58

Lectura: 2'

2017-11-16T09:58:00-03:00
Compartir en

Un equipo científico en Australia investiga las causas de la inesperada recuperación de las poblaciones de rana en el norte del país afectadas por un devastador hongo hace más de tres décadas, informaron hoy fuentes académicas.

Un brote del hongo chytridiomycosis en las décadas de 1980 y 1990 provocó la disminución o desaparición de varias especies de rana en la zona conocida como Wet Tropics, en el estado de Queensland, al noreste del país.

El investigador Donald McKnight indicó que el patógeno prolifera en sitios fríos y elevados, y que la mayor afectación se documentó en mesetas donde ahora las poblaciones de estos anfibios se recuperan pese a que la enfermedad persiste.

Como ejemplo, McKnight citó a la rana de cascada, ausente en todos los sondeos realizados en la década de 1990 en el parque nacional de Girramay pero de la que volvieron a detectarse ejemplares a partir de 2001.

El investigador aseguró que ahora esta especie y otras como la rana de niebla común proliferan en muchos lugares elevados.

"Lo que vemos es que la recuperación de las poblaciones ha sido amplia y pronunciada en el caso de la rana de cascada y de rana de árbol de ojos verdes", dijo el investigador en un comunicado de la Universidad James Cook.

"Las poblaciones en la meseta de rana de árbol de ojo verde se recuperan rápidamente e incluso en un punto han vuelto a las cifras previas al declive", añadió.

La investigación baraja como hipótesis para explicar esta recuperación los cambios en el comportamiento de las ranas, de su sistema inmunológico y de la comunidad bacteriana que lo habita.

Otras posibilidades son que la enfermedad se haya hecho menos virulenta, que haya habido cambios en el medio a condiciones menos favorables para el hongo o que el brote patógeno fuera provocado por factores ambientales que no se han repetido.

Otro estudio publicado este año por la JCU señaló que el hongo se reproduce mejor en temperaturas entre 17 y 25 grados centígrados, y encontró que las ranas de bosques secos más expuestas al sol sobrevivieron mejor que las de bosques tropicales.

EFE